Talones Agrietados

Descripción
Algunas veces, principalmente durante un clima seco o si usa sandalias durante mucho tiempo, es probable que note que sus talones tienen la misma textura de una pared áspera de concreto. Se han vuelto gruesos, ásperos e incluso pueden haber comenzado a decir groserías sólo para asustarlo. Con el tiempo, quizás vea que sus talones comienzan a agrietarse en ciertas partes. Estas grietas pueden ser pequeñas o tan profundas que pueden sangrar y provocarle dolor cuando camine. También pueden infectarse, pero esto no es tan común.

Verá, los talones sufren mucha presión mientras usted está de pie. Si está excedido de peso o si pasa mucho tiempo de pie (ya sea en el trabajo o en su casa) la presión es mayor. Bajo esa presión, la almohadilla de grasa debajo de su talón (que generalmente sirve como un almohadón para el peso de su pierna sobre el pie) intenta expandirse hacia afuera. Si su piel es seca, o si usa zapatos de talón abierto que no le brindan apoyo para reforzar esa expansión, la piel alrededor del talón puede comenzar a agrietarse. Esto puede ser bastante desagradable, ya que la piel generalmente es más bonita cuando se mantiene entera.

Algunas veces, los talones secos o agrietados pueden ser un síntoma de una condición subyacente como la diabetes o el hipotiroidismo, lo que puede reducir el sudor y por lo tanto, hacer que sus pies estén un poco más secos. Algunas condiciones de la piel también pueden ser la raíz del problema, como un eczema o psoriasis. Si está preocupado por estos problemas, quizás deba consultar a su podiatra sobre algún tratamiento.

Síntomas
Las grietas en el talón son bastante fáciles de descubrir. Sin embargo, también puede tener síntomas relacionados como la piel gruesa o seca, algunas veces pueden aparecer callos amarillentos o de un tono marrón en todo el talón. Si las grietas son profundas, pueden sangrar y si se infectan, se pueden inflamar (enrojecer, ser tibias al tacto, estar hinchadas y ser dolorosas). El dolor aparecerá cuando esté de pie y no cuando esté en el sillón mirando su serie preferida.

Diagnóstico
Su podiatra puede realizar un diagnóstico mediante un examen visual, aunque probablemente le pregunte  si siente algún tipo de dolor cuando está de pie y probablemente lo revise para asegurarse de que no haya señales de una infección. Si se sospecha un problema de diabetes o de tiroides, su podiatra puede sugerirle que se haga un análisis.

Tratamiento
Generalmente, el tratamiento implica colocarse una crema humectante en el talón y brindarle un apoyo. Puede quitar un poco de piel seca del talón frotando una piedra pómez cuando se duche o se dé un baño (si no hace ninguna de las dos cosas, puede sumergir sus pies en agua tibia durante un tiempo y luego utilizar la piedra pómez). Luego, cuando sus pies estén bien secos puede colocarse una crema humectante (las cremas con base de aceites suelen funcionar mejor) para mantener su piel suave y menos vulnerables a sufrir grietas. Por cierto, NO intente curar su piel seca con un par de tijeras o una navaja. Cortar los callos de sus pies puede generar complicaciones, como hacer cortes demasiado profundos y provocar una infección. Piense en un niño intentando cortarse el pelo: los resultados nunca son los esperados.

Evite usar zapatos de talón abierto (como ojotas u otras sandalias) durante un tiempo, o por lo menos trate de alternar con un par de zapatos que tenga el talón cubierto. También, puede comprar una talonera para ofrecer más apoyo, evitando que el talón se expanda hacia afuera lo que provoca las grietas. Si las grietas son bastante graves o persistentes, su podiatra debe ser capaz de sujetar su talón para brindar apoyo adicional, el médico debe utilizar algún tipo de pegamento especial (diseñado para usarlo con la piel, no es el tipo de pegamento que usan los niños para pegar fideos secos en un papel) para eliminar las grietas de su talón y permitir que se curen.

Las grietas infectadas pueden necesitar más ayuda para curarse, como antibióticos, pero su médico seguramente sabrá cómo aconsejarlo.